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El vino es un producto natural tan versátil, que presenta una gran paleta de colores. Aunque algunos puedan pasar desapercibidos o no nos hayamos fijado de forma fútil, los vinos tintos, blancos y rosados exhiben una notable diversidad cromática que es importante conocer.
La gama de colores de vino es considerablemente amplia, ofreciendo cada uno de ellos una serie de matices que revelan detalles específicos sobre la naturaleza y evolución del vino en cuestión.
Es importante destacar que el color del vino tinto, el caso que nos ocupa, puede experimentar variaciones significativas con el transcurso del tiempo, reflejando así su carácter dinámico y evolutivo. Estas tonalidades, influidas por factores como el tipo de uva empleada y su proceso de crianza, pueden abarcar desde una delicada tonalidad violácea en los ejemplares más jóvenes, hasta un profundo color granate-marrón, característico de los vinos más añejos.
Conscientes de las grandes posibilidades de disfrute de esta característica del vino, en Solar de Samaniego hemos decidido explorar detalladamente la amplia gama de colores del vino tinto, con el propósito de brindar una comprensión más profunda sobre esta fascinante característica vinícola.
Colores del vino
A continuación, analizaremos la rica diversidad cromática del vino tinto, comprendiendo el significado inherente a cada una de sus tonalidades.
Es fundamental subrayar que, al referirnos al color del vino, en realidad aludimos a su tonalidad, la cual se encuentra determinada por la naturaleza intrínseca del color y la manera en que este interactúa con la luz incidente que un material de determinado color es capaz de reflejar.
Dicho esto, le vamos a mostrar la gama de colores de vino tinto existentes:
- Teja: es el color característico de los vinos tintos más viejos, con tonalidades que tienen a anaranjadas. Son vinos con tiempos de crianza muy largos, durante los cuales van perdiendo intensidad de color, opacidad y brillo.
- Caoba: esta tonalidad se observa en vinos con largos periodos de crianza, donde las tonalidades más vivas comienzan a apagarse. Se intensifica el cuerpo del vino, mientras se pierde frescura y acidez.
- Granate: esta es la tonalidad de los vinos tintos en el punto álgido de su maduración, presentando un color brillante e intenso.
- Rubí: representa el tono de los vinos tintos al inicio de su maduración. Estos vinos suelen tener no más de tres años de crianza.
- Violáceo y azulado: esta tonalidad es característica de los vinos más jóvenes. Son vinos con poco cuerpo, buena acidez y frescura.
¿Qué significan lso colores del vino tinto?
El color del vino tinto proporciona indicios cruciales sobre su tiempo de maduración. Como hemos visto anteriormente, en sus primeras etapas, los vinos tintos presentan un color casi violeta.
Una evolución del vino que puede llevar un par de años en bodega y otros tantos en la bodega del consumidor, transformará este tono inicial en un codiciado rubí de intenso rojo.
En el caso de los Gran Reserva, la evolución puede extenderse más de diez o quince años. Superar estos tiempos puede resultar en una significativa pérdida de color, perceptible tanto visualmente, como en los atributos olfativos y gustativos.
El brillo del vino, que es esencialmente una extensión de su color, ofrece indicios sobre su acidez. Un vino más brillante tiende a ser más ácido. Además, la transparencia del vino nos proporciona valiosa información sobre su estabilización y proceso de filtrado.
Con excepción de los vinos notablemente apagados, calificados como "vinos muertos", el color del vino no constituye un indicador único y excluyente de su falta o no de calidad, pues esta última se establece mediante diferentes variables que incluyen su Denominación de Origen Protegida, la calidad de la uva, el proceso de elaboración y, hasta cierto punto, la armonización culinaria.
De esta manera, un vino puede ofrecer una amplia gama de perfiles gustativos y momentos de consumo. Por consiguiente, es fundamental elegir el vino tinto en función de las preferencias personales y el contexto gastronómico, más allá de su tonalidad.
Tipos de colores de los vinos con D.O. Rioja
Es importante recalcar que los colores del vino no están determinados por la Denominación de Origen Rioja, sino por una serie de factores intrínsecos al proceso de producción vinícola.
Los colores del vino son el resultado de una combinación de factores complejos que impactan en su aspecto visual.
Entre los principales condicionantes que determinan el color del vino, destacamos:
- Tipo de uva: cada variedad de uva aporta polifenoles que confieren colores distintos y característicos al vino. Es importante destacar que algunas variedades, como la garnacha tintorera, presentan peculiaridades únicas, donde tanto la piel como la pulpa poseen color, desviándose de la norma común.
- Viticultura: aunque pueda considerarse un factor secundario, el cultivo de las vides, influenciado por el clima y el suelo, conocido como terruño, también incide en el color del vino. La interacción entre estos elementos del entorno vitícola contribuye a la diversidad de matices en los vinos.
- Elaboración del vino: la técnica de vinificación determina si el vino será blanco o tinto, según se mezcle o no el mosto con las partes sólidas de las uvas. Además, la temperatura de fermentación también ejerce un papel relevante, siendo los vinos fermentados a temperaturas más elevadas los que presentan colores más intensos.
- Envejecimiento del vino: La duración de la crianza del vino influye de manera significativa en su color final. El tiempo de maduración es un factor determinante en la tonalidad del vino, otorgándole una profundidad y riqueza visual distintiva.
Conscientes de su calidad, Solar de Samaniego le ofrece una amplia selección de vino Rioja Alavesa con diversas tonalidades, reflejo del proceso de maduración y envejecimiento. La variedad de colores presentes en nuestra colección de vinos proporciona una experiencia sensorial única, que invita a explorar la riqueza y diversidad de la Denominación de Origen Rioja, pudiendo escoger entre vinos jóvenes, crianza, reserva o de autor en función del tiempo de crianza.
Así mismo, también disponemos de una selecta colección de vino Ribera del Duero de la más alta calidad, con distintas tonalidades, elaborado en Bodegas Durón, del Grupo Solar de Samaniego, con uva Tempranillo procedente de nuestros viñedos.
Suscripciones de vino
- Amoldadas a las necesidades del cliente.
- Suscripción mensual, bimestral y trimestral.
- Suscripciones a vinos D.O.Ca. Rioja y D.O. Ribera del Duero.
